-listo- dije,
tirando todas las carpetas sobre el escritorio de Jared, algunas de ellas,
llegaron a deslizarse a donde él estaba.
-y esto que
significa?
-he
terminado- dije- me entregaste a estas personas para que las castigara y ya lo
he hecho, a cada una de ellas les he dado lo que se merecían
-y que paso
con ellas?
-lo más
probable es que ahora estén esperando su castigo en alguno de los círculos del
infierno.
-tienes mis
felicitaciones Sam- dijo, levantándose de su asiento y acercándose a mi-
quieres narrarme lo que hiciste?
-solo te diré
que nunca olvidarán mi rostro, por el resto de su vida inmortal.
-me gusta-
dijo, sonriendo- ves? No era tan terrible después de todo.
-sí, tienes
razón
-por ahora,
solo tienes que salir con alguno de los pecados a otorgarle a la gente sus
pecados o si quieres puedes salir sola, eso lo decides tu
-ya…
-desde el
momento en que le asignes uno, esa pecado aparecerá en su historial- dijo,
apuntando a las carpetas
-nada más de
castigos por ahora?
-te estoy
entrenando de a poco- dijo- ahora puedes irte.
Había
encontrado la mejor forma de lidiar mejor con todo esto: seguirle el juego a
Jared.
El problema,
es que realmente él tenía razón en un punto. Después de lo de las gemelas, se
me hizo mucho más fácil sacar ese lado… demente y castigarlas.
Además, cada
vez me sentía mucho mejor haciendo lo que hacía. Sentía placer.
Mi miedo
ahora era si esto podía llegar a consumirme y darle en el gusto a Jared.
Convertirme
en alguien como él.
Sacudí la
cabeza.
Trate de no
perderme camino a casa, en donde definitivamente ya no me sentía a gusto y todo
por culpa de Syn y de Ronnie.
Después del
incidente, no he vuelto a hablar con ellos, de hecho, los evito
Se lo
merecen, por hacerme sentir incomoda.
Entre a la
casa y trate de hacer el menor ruido posible
-SAM!-
escuche que dijo Arin. Creo que casi llego al techo del salto que di.
-no tienes
mejor forma de asustarme!?- dije, literalmente con el corazón en la mano
-iba a ir a
buscar uno de esos tubos con confeti para recibirte, pero pensé que no te
gustaría
-hubiera
preferido eso a un grito de la nada
-como te fue?
-no más
castigos por ahora
-eso es muy
bueno, al menos, podrás descansar un poco
-descansar
como tú?
-no, si
quieres yo descanso por ti si no quieres
-no, basta
con que descanses por todo ser viviente de este mundo
-que harás
ahora? No quiero ir a dormir y no tengo nada que hacer
-y los demás?
-no sé
-quieres ir a
comer helado?
-eso no será
muy cansador de hacer?
-Arin!
Quieres o no?!
-… café
helado?
-que sean
dos- dije y volví a abrir la puerta, para salir a pasar una tarde de descanso
con mi amigo Pereza.
Nunca se me pasaría
por la mente de que Arin tiene como 23 años de edad. Se comporta como… un niño
muy, muy pequeño.
Tal vez sea
por su pecado, no sé, siempre esta medio soñoliento.
Al menos, él
me hacía sentir más en casa.
-di algo que
me voy a quedar dormido!
-puedes
caminar dormido?
-hay muchas
cosas que puedo hacer dormido… comer, hablar, caminar…
-así que
puedo suponer que ahora estas durmiendo?
-quien sabe?
-tu deberías
saber… probemos…- dije y le piñizque el brazo
-ERA ESO
NECESARIO!?- dijo, sobándose el brazo
-si- dije-
no, no estás durmiendo
-podemos
hacer otra cosa que no sea peñizcarme? Puedo peñizcarte?
-aléjate de
mi oh ser luju… perezoso!
-lujurioso?
Syn?
-fue… un
error al hablar, todos terminan en oso!
-… o fue tu
subconsciente jugándote una mala pasada…
-cállate Arin
-no quieres
hablar… de lo que paso la otra semana?
-yo… no sé
-mira, puede
ser nada que ver, pero creo que tu encontraste de Syn andaba… raro
-si
-eso se debía
a que llevaba una semana sin… llevar a cabo su pecado y puede que sepas que si
pasamos cierta cantidad de tiempo sin llevar a cabo nuestro pecado, pueden
pasar cosas
-sin hacer
las cosas más locas? En serio?
-si- dijo,
omitiendo mi última pregunta- tengo mis tres opciones a por que pudo haber
hecho eso
-y puedo
saber cuáles son? digo yo, si quieres contármelas
-uno, por lo
que ocurrió con Michelle
-oh…
-dos, por que
como tu tenias que castigar justamente a Michelle, no quería que te sintieras
culpable por estar relacionado a ella
-y tres?-
dije. No, no me gusto lo último
-por qué tal vez
quiere cambiar por cierta señorita…
-y por cual
te inclinas tu?- dije, realmente incomoda por lo que acababa de decir
-por una
combinación de las dos últimas
-oh…
-Sam… puedo
hacerte una pregunta ahora yo?
-si?
-que sientes
por Ronnie?
-yo…
-y que sientes
por Syn?
Otra
situación incómoda.
Creo que en
estos últimos días he vivido más situaciones de ese tipo que en toda mi vida.
Pero Arin
recién hizo que algo en mi cabeza comenzará a trabajar
¿Qué sentía
por ellos?
Vamos…
contéstale!
-Arin… puedo
confiar en ti cierto?
-siempre que
quieras
-estas
dispuesto a escuchar algo que tal vez nunca he dicho en mi vida, por lo cual,
puede que no tenga sentido alguno?
-nunca has
sentido algo así?
-vamos! Tú
crees que alguien que habla y hace cosas como yo suele tener gente cercana?
-si hubieras
estado en mis tiempos, hubiéramos sido los mejores amigos…
-… yo también
lo creo…
-entonces…?
-Ronnie… él
me hace sentir como si fuera una niña pequeña y frágil y Syn… con él siento que
puedo ser como siempre soy. Creo que ambos complementan una parte de mí que ha
pasado desapercibida siempre y ha estado oculta
-a cuál de
los dos prefieres?
-como vas y
me haces esa pregunta?
-debes tener
tu preferencias, al menos después de ver como se peleaban por ti
-lo único que
diré a eso, es que el beso de Syn hizo que algo aflorara en mi
-… así que te
beso…- dijo, poniendo cara… pervertida?
-Arin? Esa
cara no es tuya! Es mucha junta con Syn!
-déjame ser
un Arin cualquiera!
Seguimos
caminando, hasta que llegamos a un lugar en donde pedimos nuestros cafés
helados.
Arin comenzó
a preguntarme sobre mi familia, lo que solía hacer en mi vida antes de llegar
aquí, en lo que me entretenía durante mis tardes.
Metiche
No me negaba
a contarle todo lo que me preguntaba, de hecho, sentía la necesidad de
contarlo, para no olvidarlo.
-Sam, puedo
preguntarte algo?
-me has
preguntado sobre toda mi vida, que quieres saber ahora?
-Jared te
ofreció deseos… cuando piensas pedírselos? Que pedirás?
-eres
demasiado entrometido
-solo siento
curiosidad
-sabes? No tengo
ni idea, de hecho, había olvidado lo de los deseos- dije, siendo sincera- pero
yo creo que cuando todo termine, los pediré
-y si no
termina?
-no seamos
pesimistas- aunque ni yo sabía cuando terminaría esto.
Nos
mantuvimos un momento en silencio mientras yo me entretenía viendo a la mesera.
Por lo que veía, estaba un poco celosa de lo melosos que era la pareja que
estaba a unos metros de distancia de nosotros, lo creo por que les tiro un vaso
con agua “sin querer” y luego se fue riendo.
-… envidia
-así que en
eso estabas- dijo- ya te perdimos
-como que me
perdieron?
-acabas de
otorgarle a esa mujer su pecado, pero lo hiciste casi sin darte cuenta. Ahora
lo haces prácticamente automáticamente y te entretiene viendo como se delata
solo
-deja de
hacer de psicólogo! No te viene!
-ahora que
recuerdo, te iba a hacer una pregunta sobre tu vida
-a ver?
-tú crees que
yo pudiera vivir como lo hacen las personas hoy en día?
-Arin, eres
el más joven- dije- no hay mucha diferencia entre lo que hacían los jóvenes hace
como 30 años y los de ahora
-sí, si hay
diferencia
-bueno,
hubieras sobrevivido sin problemas
-como tú?
-no, no como
yo- dije. Cambie el tema- Arin ¿Sabes algo de tu familia?
-tú has
tenido suerte en lo que Jared prefirió hacer contigo respecto a tu familia
-por qué?
-todos
nosotros, los pecados, morimos antes de volvernos lo que somos
-o sea que…
-sí, nuestras
familias sufrieron y lloraron nuestra partida
-al principio
no les dolió?
-claro que
no! Nosotros de por si también teníamos ese lado medio… oscuro, como tú, cuando
aceptamos, pero cuando tienes mucho tiempo libre, te pones a pensar en muchas
cosas
-ya veo
-cosas que tu
ya has empezado a preguntarte, como que estarías haciendo ahora no?
-tienes
razón, no te miento
-mientras que
tu, desapareciste de todo rastro de este mundo. Tu oficialmente ya no existes,
así debe ser todo más fácil
-claro, es
todo más fácil si nadie sabe de tu existencia, sabiendo que si mueres nadie
llorara tu partida por que ni siquiera eres una partícula de polvo en espacio
-bueno,
bueno, no te enojes
-enojarme yo?
Me subestimas querido Pereza
Eran cerca de
las 8 de la noche y el atardecer ya había inundado todo el lugar con un color
naranjo.
Con Arin nos
fuimos derecho a nuestro hogar, ya que ambos teníamos sueño.
Durante todo
el camino nos entretuvimos dándoles pecados a las personas.
-que vas a
hacer ahora, después de que cruces la puerta?- me pregunto, cuando ya estábamos
a unos pasos de nuestra casa
-Arin, puedo
hacerte una pregunta, es la última que te hago
-si
-sabes que
hay alguna persona paso por lo mismo que yo, pero antes, obviamente
-sí, pero no
estuve aquí cuando eso paso
-y… sabes si
esa persona termino siendo consumida por todo esto?
-… si
jkashdjkash Mujeeerrrr! No le había comentado los capítulooos x----x *muere* ASI QUE AHORA ME PONGO AL DÍA :'D!!!!
ResponderEliminarArin.... tan metiche que naciste chiquillo xD pero Sam tampoco lo hace nada mal.
Y que saen de que syn es mala junta para el inocente arin :c se le pegaran sus germenes lujuriosos!!!!
ashdkjlash que le deparará a Sam D: ! Que Arin mande a un oso para que ataque a su lado malvado que quiere consumirlaaa... espera, arin es pereza, no tiene nada que ver con mandar animales .______________. olvídalo...